La lavanda es un arbusto con más de 40 variedades que crece en climas cálidos. Se caracteriza por su color púrpura y su atractivo aroma floral. Su origen está en el Mediterráneo, Europa del sur y algunas regiones de África.
El uso del incienso de lavanda tiene raíces históricas profundas que se remontan a las antiguas civilizaciones del Mediterráneo. La lavanda, conocida por sus propiedades aromáticas y medicinales, fue cultivada por los egipcios, griegos y romanos. En el antiguo Egipto, la lavanda se utilizaba en el proceso de momificación y en rituales religiosos por su capacidad para purificar y embalsamar. Los romanos la apreciaban por sus cualidades calmantes y la incorporaban en baños y perfumes.
Durante la Edad Media, los monjes cultivaban lavanda en los jardines de los monasterios y la utilizaban para hacer inciensos y aceites esenciales, apreciando su capacidad para promover la paz y la tranquilidad. A lo largo de los siglos, la lavanda ha mantenido su reputación como una planta versátil y beneficiosa, y su uso en incienso continúa siendo valorado por sus efectos relajantes y purificadores.
Hoy en día la lavanda es pionera en la cosmética moderna gracias a sus múltiples propiedades para el cuidado corporal, y en la aromaterapia por ser una excelente aliada para combatir la ansiedad.
El aroma del incienso de lavanda es suave, floral y ligeramente herbáceo, con notas frescas y calmantes que evocan una sensación de tranquilidad y bienestar. Su fragancia es delicada y reconfortante, perfecta para crear un ambiente relajante.
A continuación vamos a per las propiedades y los distintos usos del incienso de lavanda (uno de nuestros favoritos).
PROPIEDADES DEL INCIENSO DE LAVANDA
El incienso de lavanda es altamente valorado por su fragancia delicada y sus numerosas propiedades beneficiosas, que abarcan desde la relajación mental hasta el alivio físico.
Los principales beneficios de la lavanda en la aromaterapia son:
Calma el ánimo, ya que es super eficaz contra los dolores de cabeza, el nerviosismo y la inquietud.
Reduce el estrés y la ansiedad, promoviendo una sensación de calma y bienestar.
Relaja los nervios. Los científicos dicen que es igual de eficaz que el Valium.
Es efectivo para mejorar la calidad del sueño. Es comúnmente utilizado antes de acostarse para inducir un sueño más profundo y reparador.
Purifica el aire y limpia espacios, eliminando bacterias y virus.
Descongestiona el sistema respiratorio.
Favorece la concentración, la fuerza espiritual y el crecimiento del alma.
Mejora del estado de ánimo, ayudando a combatir la depresión y la fatiga.
Reduce el estrés en lugares de trabajo y oficinas.
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USOS DEL INCIENSO DE LAVANDA
Algunos de los principales usos del Incienso de Lavanda en tu día a día pueden ser los siguientes:
Si necesitas DESCANSAR Y DORMIR MEJOR, enciende un incienso de Lavanda en tu habitación un poco antes de acostarte.
Si tienes un CENTRO DE BIENESTAR donde impartes majases, reiki u otras terapias, no puede faltar el Incienso de Lavanda durante tus sesiones. Aportará una relajación asegurada en tus pacientes.
Si te DUELE mucho LA CABEZA, enciende incienso de lavanda.
Si en el TRABAJO hay mucho estrés, pon incienso de lavanda.
Nuestros productos con Lavanda
Para terminar, os dejamos con esta frase para la lavanda que, como hemos visto, se caracteriza por aportar calma y bienestar, ya sea a nivel físico que mental.
Así como el romero es para el espíritu, la lavanda es para el alma.
¿Y tú? ¿En qué formatos te beneficias de esta maravillosa planta?
Esperamos que los disfrutes mucho y que te aporten esa calma que los caracteriza.
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